bizcocho que se hace con un yogur y se utiliza el envase de este para las medidas, solo que yo la fui modificando para poderla adaptar a la dieta que el médico me puso cuando estaba malita.
Ingredientes:
1 yogur desnatado
1 medida de yogur de aceite (de oliva suave o de girasol)
1 medida de yogur de azúcar moreno (puede ser un vasito de fructosa que es lo que suelo usar, si es sacarina o aspartamo, es menos, mirar las equivalencias edulcorante/azúcar en el bote)
3 medidas de yogur de harina para bizcochos
1 medida de yogur de salvado integral de trigo o avena
3 huevos
1 sobre de levadura
La piel de una naranja (o limón)
No es una foto de mi bizcocho, es de google, pero sale parecido
Elaboración
1. Batimos los huevos, cuanto más batidos estén más esponjoso saldrá el bizcocho. Añadimos el edulcorante o el azúcar lentamente sin dejar de batir.
2. añadimos en yogur y el aceite y seguimos batiendo.
3. Añadimos la harina poco a poco mientras vamos mezclando, continuamos con el salvado y por último la levadura.
4. Lavamos bien la naranja (o el limón) y rallamos su piel sobre la masa. Mezclamos bien.
5. untamos un molde con aceite de girasol y añadimos la masa.
6. Horneamos el bizcocho a 180ºC con el horno puesto con calor arriba y abajo. Dependiendo del horno tarda un tiempo, yo lo voy controlando a ojo, si veo que ha subido ya mucho y está dorado, abro el horno y sin sacar el bizcocho (si lo sacamos y no está hecho se baja) lo pinchamos para ver si está hecho por dentro.
Truco: si el bizcocho sube mucho por el centro pero nada por los lados, la temperatura del horno es muy alta, bájala un poco. Si sube mucho por los lados, es al contrario, hay que subirla.
La otra receta de la que hablamos por twitter ya no es de dieta, pero está tan rica que nos merecemos un capricho. Se trata de uno de esos dulces árabes que tan buenos nos saben. A mí al menos me encanta. La saqué de un libro de recetas árabes, la he hecho un par de veces y siempre ha triunfado. Eso sí, sale algo más caro hacerla y lleva más tiempo, es para ocasiones especiales.
Baklava
Ingredientes:
200g de nueces peladas
200g de almendras sin piel
2 claras de huevo
50g de azúcar
1 cucharadita de canela molida
2 cucharadas de agua de azahar
100g de mantequilla
300g de masa de fila
50g de pistachos sin cáscara
Para el jarabe:
3 naranjas
1 limón
200g de miel
Rico, rico, riquísimo
Elaboración:
1. Las nueces y las almendras se pican muy finas o se rallan. Se baten las claras a punto de nieve y se añade azúcar y canela. Se mezcla el agua de azahar y los frutos secos.
2. calentar el horno a 180ºC. Derretir la mantequilla sin que llegue a quemarse. Se usa un molde grande y rectangular (puede ser la bandeja del horno). Se separa con cuidado la masa y se corta de las dimensiones del molde.
3. se engrasa el molde con un poco de mantequilla. Colocar alternativamente 1 capa de masa, 1 de mantequilla, otra de masa, otra de mantequilla y luego una capa fina de la masa de frutos secos que se hizo en el punto 1. Se van intercalando por este orden hasta que se acabe la masa. La mantequilla la extendemos siempre con pincel para poner la mínima cantidad posible y no dañar la masa. Con un cuchillo afilado, cortamos porciones de 5x5cm. Se mete en el horno unos 40 min, hasta que se tueste bien.
4. Se pican bien los pistachos. Las naranjas y el limón se exprimen y el jugo se calienta en una cazuela con la miel. Este jarabe se deja enfriar un poco y se escancia sobre el baklaba. Se espolvorea con pistachos, se deja enfriar y que empape bien toda una noche.
La receta original no lleva pistachos dentro, pero yo suelo añadirlos en el paso 1 porque me gustan mucho, así que uso 150g de pistachos.
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